Desde la lesión de Alex Bregman hace unas semanas, el venezolano Abraham Toro ha emergido como una pieza clave en la ofensiva de los Medias Rojas de Boston.
Con 28 años y nacido en Quebec, el infielder ha respondido con el bate y ha sabido llenar el vacío dejado por el estelar tercera base.
En sus primeros 24 encuentros con el equipo grande, Toro muestra números sobresalientes: batea para .341, con 28 imparables en 82 turnos, ha anotado 12 carreras, conectado siete dobles y cuatro cuadrangulares, además de impulsar 10 rayitas. Su línea ofensiva lo confirma como un aporte sólido, con OBP de .353, Slugging de .573 y un OPS de .926, mientras que su OPS+ de 154 lo ubica 54% por encima del promedio de los bateadores en la liga.
Pero su impacto no se limita al global de su temporada. En los últimos 15 días, el venezolano ha liderado la toleraría ‘patirroja’ con un promedio de .386 y 17 imparables, siendo también segundo en dobles (4), almohadillas totales (24) y porcentaje de embasado (.404), además de sumar cinco extrabases.
Seguridad defensiva y posible permanencia en la alineación
Toro también ha demostrado ser una opción fiable a la defensiva. Su más reciente exhibición ocurrió el domingo, cuando realizó una jugada espectacular en tercera base al atrapar un batazo de 105.8 mph de Ben Rice en el tercer episodio. Con una reacción impecable y un lanzamiento preciso hacia su derecha, evitó lo que parecía un imparable seguro.
Asimismo, su rendimiento supera al de Triston Casas, quien ha estado ausente por lesión durante toda la temporada. En sus 29 juegos antes de quedar fuera, Casas bateaba para apenas .182 con seis extrabases y un OPS+ de 63, cifras que dejan abierta la posibilidad de que Toro continúe en la alineación cuando Bregman regrese.
Con una ofensiva en ascenso y una defensiva confiable, Abraham Toro se ha ganado su lugar en Boston.
