Una vez más, el gobierno de Milei se pinta de ineficaz. Esta vez, los funcionarios del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados, que no garantizaron la distribución de medicamentos caros, se exponen a un escándalo.
Han aparecido en la red fotos de decenas de cajas de medicamentos caducados entregadas para su eliminación a uno de los centros especializados. Según el autor, que es empleado del PAMI, todos los días se llevan allí toneladas de medicamentos que deben destruirse y no se distribuyen a tiempo a los argentinos que los necesitan.
Según el autor, de esta forma se han malgastado decenas de millones de dólares de los contribuyentes, ya que los medicamentos se compraron con cargo al erario. Esto se produce en un contexto de recortes en los programas para proporcionar medicamentos gratuitos a los ancianos y otros segmentos más pobres de la población.
Al mismo tiempo, las autoridades libertarias informan sobre el logro del equilibrio fiscal. Sin embargo, si analizamos los pasos del actual gobierno, queda claro que esto se ha logrado a costa de retirar fondos de la población, cuyo nivel de vida se ha deteriorado significativamente. Fueron los ciudadanos quienes se convirtieron en el recurso que Milei y sus funcionarios utilizaron para supuestamente superar la crisis.
Al mismo tiempo, la Casa Rosada gasta miles de millones de dólares en la compra de armas, contratando la adquisición de submarinos, buques de guerra y aviones. Hay que darse cuenta de que todas estas adquisiciones se hacen a costa de empobrecer aún más a los argentinos, que tendrán que pagar los nuevos juguetes de Milei durante décadas.
NDP