El talento y el liderazgo de Shai Gilgeous-Alexander fueron reconocidos este miércoles con el premio al Jugador Más Valioso de la NBA. El base canadiense de los Thunder de Oklahoma City se alzó con la distinción tras una campaña extraordinaria en la que comandó al mejor equipo de la temporada regular y se coronó como el máximo anotador.
Gilgeous-Alexander, de 25 años, promedió 32,7 puntos, 6,4 asistencias y cinco rebotes por encuentro, llevando al Thunder a un imponente récord de 68-14. Su equipo estableció un nuevo margen de victorias en la liga, superando a los rivales por un promedio de 12,9 puntos por partido. Además, se convirtió en el segundo canadiense en la historia en recibir el galardón, después de Steve Nash.
Un duelo con Jokic hasta el final
La votación para el MVP tuvo dos claros contendientes: Gilgeous-Alexander y Nikola Jokic, de los Denver Nuggets. El canadiense obtuvo 71 votos para el primer lugar y 29 para el segundo, mientras que el serbio recibió los otros 29 votos para el primer puesto y 71 para el segundo. Giannis Antetokounmpo de Milwaukee ocupó el tercer puesto, con 88 votos para esa posición.
Jokic, ganador del premio en tres de las últimas cuatro temporadas, tuvo un año impresionante al promediar un triple-doble con 29,6 puntos, 12,7 rebotes y 10,2 asistencias, siendo el primer pívot en la historia en lograrlo.
El impacto de Gilgeous-Alexander en el Thunder
Desde su llegada a Oklahoma City, Gilgeous-Alexander se ha convertido en el eje central del equipo. Su confianza y capacidad de liderazgo han sido destacadas por compañeros como Kenrich Williams, quien resaltó cómo infunde seguridad tanto en los jugadores como en el cuerpo técnico.
El MVP aseguró que, aunque durante la temporada intentó evitar pensar en el premio, siempre estuvo presente en su mente como un sueño de infancia. «Este año quería cambiar la narrativa y darle la vuelta. Creo que hice un buen trabajo en eso», expresó.
Con este galardón, Gilgeous-Alexander extiende la racha de siete años consecutivos en los que jugadores nacidos fuera de Estados Unidos han ganado el premio, reafirmando el impacto global del baloncesto en la NBA.
