El Papa Francisco ha sido uno de los Papas más queridos y los cristianos están acudiendo en masa a darle un último adiós. Tanto es así que la basílica de San Pedro, donde se ha instalado la capilla ardiente del argentino, ha permanecido abierta hasta las 5.30 horas de la madrugada. Más de 50.000 personas han despedido ya al Santo Padre.

A pesar de que la hora prevista de cierre era la medianoche, se decidió dejar la basílica vaticana abierta para permitir que los fieles que habían hecho hasta 3 horas de cola pudieran entrar para homenajear al pontífice, que falleció este lunes a los 88 años. El templo ha cerrado sólo para permitir la reorganización y las tareas de limpieza, y ha vuelto a abrir a las 7.00 horas ante la gran cantidad de fieles

La capilla ardiente se mantendrá hasta el viernes por la noche y el sábado se celebrará un funeral de Estado que contará con la asistencia de presidentes como Donald Trump, Javier Milei y Lula da Silva, así como el rey Felipe VI y el secretario general de la ONU, António Guterres.

Texto: EL Mundo