El Ministerio Público informó este martes 1 de julio que fue condenada a ocho años de prisión la ginecobstetra Vianney Alejandra Lugo Bello (35), por «homicidio culposo» de un recién nacido, producto de «violencia obstétrica», en el estado Falcón.
Tal hecho ocurrió el 30 de diciembre de 2019 en el Hospital Rafael Calles Sierra, de Punto Fijo, cuando la madre del neonato fue referida a dicho centro de salud debido a «fuertes dolores durante su embarazo».
Una vez en el lugar fue atendida por la médica y «sometida a trabajo de parto durante 13 horas», período durante el que «se le aplicó una técnica» que «ocasiona múltiples efectos adversos» y, según el MP, está prohibida por organismos internacionales.
«Luego de varias horas de alumbramiento, en las que el neonato se mantuvo en el canal de parto, se decidió someter a la paciente a una cesárea. Una vez extraído el bebé, presentaba precarias condiciones médicas y daños neurológicos severos, por lo que fue ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales, donde falleció horas después», indicó.
Ante la situación, la madre del infante se trasladó hasta el Cicpc para denunciar el hecho y, tras «investigaciones y diligencias pertinentes», se determinó que el «recién nacido murió producto del daño irreversible causado por la aplicación de la técnica».
Durante el juicio, la Fiscalía de Falcón ratificó la acusación en contra la médica por la «comisión de homicidio culposo a título de culpa consciente y violencia obstétrica», agregó la institución.