Durante unos siete meses los familiares de Carlos Antonio González Dugarte (44) no tuvieron noticias de su paradero. Tras la denuncia de una hermana, los funcionarios de la Delegación Municipal Caja Seca encontraron su cuerpo desmembrado y sepultado en el parcelamiento Caño Rico, municipio Sucre, estado Zulia.
Por el asesinato de González detuvieron a su mujer, Pierina Yoliber Key (42), y a sus dos hijastros, Adrián José Pinto Key (24) y una joven, de 15 años. A todos los capturaron cuando intentaban escapar hacia el estado Miranda.
Durante los interrogatorios, los detenidos confesaron que decidieron matarlo luego de que González los amenazara con echarlos del fundo de su propiedad tras un reclamo por las constantes agresiones hacia Pierina.
«La familia Key planificó cegarle la vida. Primero lo golpearon salvajemente; posteriormente, con un machete y un hacha lo desmembraron. Finalmente lo sepultaron en los terrenos del fundo», detalló, en un boletín de prensa, el CICPC.
Para no despertar sospechas, los Key le comentaron a los vecinos que González se había separado de Pierina y se había mudado a casa de un familiar.
Los González empezaron a sospechar cuando se percataron que Carlos no estaba con ningún familiar. Denunciaron y semanas después hallaron sus restos.
Se requirió apoyo de los funcionarios del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses (Senamecf) para extraer el cuerpo y practicarle la necropsia. Los resultados pasaron a la Fiscalía 21º del Ministerio Público, quien maneja el caso.
