Un equipo de productores pudo crear una canción llamada Kan Leolam (Aquí para siempre) con las voces de dos artistas muertos de origen israelí, Ofra Haza y Zohar Argov. Todo gracias a la inteligencia artificial.
BluRadio reportó que de acuerdo con el medio The Times of Israel, el proyecto, el cual fue creado por la empresa Session 42, una productora de música israelí que utiliza tecnología y análisis de datos para crear canciones, ha involucrado la recolección de muestras de voz de los cantantes, incluyendo entrevistas, presentaciones en vivo y grabaciones de estudio. Luego, se utilizó algoritmos de inteligencia artificial para procesar y analizar la voz de los cantantes, identificando patrones y características únicas.
A partir de esta información, se crearon modelos de inteligencia artificial capaces de imitar la voz de los cantantes, permitiendo recrear su estilo y entonación. Los modelos también pueden ajustarse para adaptarse a diferentes idiomas y estilos de música, lo que abre la posibilidad de recrear la voz de los artistas en nuevas grabaciones y colaboraciones.
“La idea era mezclar tecnología y creatividad. La tecnología tenía que romper todas las fronteras, ser lo más salvajes y locos que pudiéramos ser y cumplir fantasías. Esta canción es un gran ejemplo de eso”, dijo Oudi Antebi, director ejecutivo y cofundador de Session 42.
Sin duda, este avance en la tecnología de inteligencia artificial puede tener importantes implicaciones en el mundo de la música y la cultura, ya que la posibilidad de recrear la voz de artistas fallecidos podría permitir la creación de nuevas obras y colaboraciones, así como la preservación del legado musical de grandes figuras.
Sin embargo, después de que el suceso se volviera viral, en redes sociales surgió un gran debate, pues muchos internautas se preguntaron quién tiene el derecho de usar la voz recreada de un artista fallecido y cómo se debería compensar a la familia y herederos del artista por el uso de su voz.
En resumen, el proyecto de Session 42 para revivir las voces de Ofra Haza y Zohar Argov a través de la inteligencia artificial es un avance emocionante en la tecnología, sin embargo, también plantea importantes preguntas éticas y legales que deben ser abordadas a medida que esta tecnología avanza y se vuelve más común en la cultura y la música.
