El Thunder de Oklahoma City enfrenta una situación desafiante en las Finales de la NBA tras caer 116-107 ante los Pacers de Indiana en el tercer partido de la serie, disputado el miércoles. Con esta derrota, el equipo de Mark Daigneault se encuentra abajo 2-1 y deberá reaccionar en el cuarto encuentro, programado para el viernes en Indianápolis.
La irregularidad ha sido una constante para el Thunder en esta serie. El equipo perdió el primer partido por un tiro agónico de Tyrese Haliburton, se recuperó con una victoria cómoda en el segundo duelo y nuevamente sufrió un revés en los minutos finales del tercero. “Creo que fue una noche poco característica para nosotros en muchos aspectos”, admitió Daigneault. “Tenemos que aprender de esto y volver a ser quienes somos en el cuarto partido. Si lo hacemos, creo que tendremos una mejor oportunidad de ganar”.
En el tercer juego, Oklahoma City desperdició una ventaja en el último cuarto por segunda vez en la serie, cometió múltiples errores que resultaron en 21 puntos por pérdidas de balón y no logró frenar a la banca de Indiana, que superó a los suplentes del Thunder por un contundente 49-18.
El panorama no es del todo desconocido para el equipo. En las semifinales de la Conferencia Oeste, enfrentaron un escenario similar contra Denver, logrando remontar para avanzar. Ahora, deberán encontrar nuevamente esa fortaleza con el campeonato en juego.
El alero Chet Holmgren, consciente de la presión, enfatizó la necesidad de concentración. “No diría que ahora es el momento para las emociones, para estar pensando en cómo te sientes”, comentó. “Tenemos una gran oportunidad aquí y lo bueno es que tenemos otro partido por delante, el cuarto”.
Con la serie en desventaja, el Thunder intentará reaccionar en Indianápolis y recuperar su nivel para mantenerse en la lucha por el título.
