UCV recupera vitral de Braulio Salazar en la Escuela de Medicina «Luis Razetti»
Esta obra, compuesta por bloques de vidrio coloreado, es una pieza emblemática del patrimonio artístico de la UCV y actualmente se encuentra en fase de diagnóstico y remoción de piezas deterioradas, bajo la supervisión de un equipo multidisciplinario especializado, destaca nota de prensa.

Braulio Salazar: Un pionero del arte moderno en Venezuela
Braulio Salazar (1917–2008) fue uno de los artistas venezolanos más destacados del siglo
XX, reconocido por su dominio en pintura, vitrales y muralismo. Formado en la Escuela de
Artes Plásticas y Aplicadas de Caracas, su obra se enmarca dentro del modernismo y la
abstracción geométrica, con influencias del constructivismo y el arte cinético.
Salazar fue parte fundamental del movimiento de integración arte-arquitectura, impulsado
en la UCV durante la década de 1950, junto a figuras como Carlos Raúl Villanueva, Jesús
Soto y Alejandro Otero. Su trabajo en vitrales, como el de la Escuela de Medicina, destaca
por su juego de transparencias, colores vibrantes y composiciones que dialogan con la luz
natural, creando efectos visuales únicos.
El vitral de la UCV: Una joya artística en recuperación
El vitral de la Escuela de Medicina, diseñado por Salazar, es una obra de alto valor
histórico y estético, representativa de la época dorada del arte universitario en Venezuela.
Construido con vidrios coloreados y estructuras de concreto, la pieza se integra
armónicamente al espacio arquitectónico, reflejando la visión de Salazar sobre el arte como
elemento transformador de los entornos públicos.
El proceso de restauración incluye:
Análisis técnico de las piezas afectadas por humedad, fracturas o desgaste. Remoción cuidadosa de los módulos dañados para su restauración en taller. Documentación
fotográfica y estructural para garantizar la fidelidad a la obra original.
Este proyecto reafirma el compromiso de la Comisión Presidencial UCV con la
preservación de su patrimonio cultural, en línea con la declaración como Patrimonio
Mundial de la Humanidad por la UNESCO (2000).
Una vez finalizada la fase de diagnóstico, se procederá a la reposición de las piezas
restauradas y refuerzo estructural, con miras a devolverle su esplendor original a esta obra
maestra del arte venezolano.
