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(Marlene Piña Acosta) .- Monseñor Jesús González de Zárate Salas, arzobispo de Valencia, en su mensaje de Navidad 2024, recordó que nuestra esperanza y confianza reside en Jesucristo.
“Él es nuestra esperanza. Una esperanza que no defrauda”, recalcó el prelado en su mensaje transmitido a pocas horas de la celebración de la Navidad.
“Celebramos la Navidad, la fiesta del nacimiento de nuestro Señor Jesucristo. Recordamos en la fe que el hijo de Dios se hizo hombre y puso su morada en medio de nosotros para traernos la salvación”.
“En esta ocasión quiero hacerles llegar un saludo muy cordial a todos los hijos de la Arquidiócesis de Valencia. Los que viven en nuestro territorio, y también los que viven más allá de nuestras fronteras. Los aguinaldos, las celebraciones festivas y el compartir navideño, el encuentro de la familia es una ocasión, una oportunidad para encontrarnos con nuestros familiares y amigos, renovando también nuestra fe en nuestro Señor Jesucristo”.
“Aunque la Navidad de este año la vivamos en medio de los estragos que causan la guerra, la pobreza y la desigualdad, los cristianos podemos celebrarla porque nuestra esperanza y confianza reside en Jesucristo. Él es nuestra esperanza, un esperanza que no defrauda”.
Además, recordó que la Navidad de 2024 coincide con el inicio del jubileo o Año Santo.
“El papa Francisco nos ha invitado a celebrarlo bajo el lema “peregrinos de la esperanza”. En nuestra Arquidiócesis iniciaremos este Año Santo el domingo 29 de diciembre a partir de las 3 pm. Las dificultades que hoy vivimos deben ser para nosotros un llamado de atención para transformar los grandes anhelos del corazón, el vivir en paz, en vivir concordia, el que reine la justicia, que la podamos tener todos en una vida digna, en signos correctos de esperanza para aquellos que hoy están enfermos, para los que sufren, para los que están encarcelados y para los jóvenes que no tienen oportunidades”.
Monseñor Jesús González de Zárate ora particularmente en esta Navidad para que todos aquellos que no pueden celebrar en estos días con sus familiares y seres queridos, porque están privados de libertad o lejos de sus familiares por razones políticas, puedan alcanzar el anhelo de reencontrarse con los suyos.