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Por Rafael Blanco*
El país está en una situación muy complicada ya que el Presidente a juramentarse el próximo 10 de enero lo hará con una opinión pública en contra de 67-30, un hecho político sin precedentes históricos en las transiciones y cambios de gobierno del mundo.
El nuevo Presidente estadounidense advierte que no nos comprarán más petróleo porque ellos tienen 5 veces más que Venezuela, lo que nos lleva a pensar que probablemente revocarán las licencias a Chevron y demás empresas petroleras internacionales que operan en el país, sepultando nuestra producción petrolera a tan sólo 300 mil barriles diarios, es decir, para nuestro consumo interno y el de Cuba quien hace de mentor de este gobierno. Trump además designó un funcionario diplomático para países en situaciones especiales por así decirlo, con expresa mención de atender los casos de Corea del Norte y de Venezuela, y ello nos induce a pensar que visualizan la crisis venezolana para largo rato.
En su programa de ayer Ivan Simonovis, quien viene hablando sobre Erick Prince y su Ya Venezuela, informó tajantemente que no habrá ninguna invasión, ni perturbación paramilitar alguna al pais, cuando mucho una probable extracción de altos cargos, lo que nos lleva a pensar que alguien de nivel superior abortó los sueños y planes bélicos que nos venían vendiendo por las redes digitales.
No veo por ningún lado la llegada de Edmundo a Venezuela y ruego a Dios porque María Corina pueda salir de la cueva donde está escondida y exiliarse, sus mensajes son sólo exhortos de fé, de oración y de denuncias, que no plantean ni avizora estrategia política alguna para el cambio de gobierno, asi como tampoco veo un nuevo y exitoso gobierno de Nicolás Maduro con tan precarias condiciones de gobernabilidad a sus espaldas.
La gente de la Plataforma Unitaria usa la ayuda humanitaria comenzando por ellos mismos, el gobierno a su vez usa el erario público, lo que nos deja al ciudadano común es encomendarnos a la Providencia Divina, para poder aguantar el chaparrón que se nos avecina en el 2025.
Toca construir futuro, faltan voluntarios con juventud, fuerza y ganas para esa tarea por Venezuela, a los adultos mayores nos corresponde aportar sapiencia.
Dios con nosotros.
FELIZ NAVIDAD
R.B.