El pasado domingo personas de la comunidad LGBTIQ+ y activistas por los derechos humanos marcharon para exigir igualdad ante las leyes venezolanas, a propósito del Día Internacional del Orgullo que se celebra cada año el 28 de junio.
Desde las 9:30 de la mañana manifestantes de todas las edades, especialmente adolescentes y adultos jóvenes, se fueron acercando al punto de concentración inicial dispuesto en el Bulevar Monseñor Adams, frente a la Plaza Drácula de Valencia, lugar donde algunos aprovecharon para realizar carteles con demandas escritas.
El recorrido inició casi a las 11 de la mañana con destino a la Av. Cedeño de la ciudad. Estuvo custodiado por algunos funcionarios de la Policía de Carabobo, quienes pidieron a los más de 300 participantes que dejaran libre el canal rápido de la Av. Bolívar para evitar la obstrucción del tráfico vehícular.
“La orientación de tu hijo no te hace fallar como padre, rechazarlo sí”, “Los DDHH no se debaten ni se votan”, “No hace falta ser la causa para defender la causa”, eran algunos de los mensajes escritos a marcador en los carteles que se alzaron al igual que las múltiples banderas coloridas en representación de las diversas orientaciones e identidades sexuales.
Durante toda la marcha sonaron canciones alusivas a la comunidad y se escucharon consignas en torno al matrimonio igualitario, permitido en 7 países de Latinoamérica (Argentina, Uruguay, Brasil, Colombia, Ecuador, Costa Rica y Chile), pero ilegal en Venezuela.
Derecho a la vida, a la libertad, a la seguridad y la igualdad de condiciones de empleo fueron otras de las exigencias de los protestantes, quienes pese a las precipitaciones registradas ese domingo, continuaron alzando sus voces.
Al final de la marcha, los miembros de Carabobo LGBT, organizadores del encuentro, ofrecieron un breve discurso en el cual agradecieron a los asistentes por visibilizar las necesidades de este sector de la población que hace vida en la entidad.
Marcha fue modificada por “permisos denegados”
Según información recabada por el equipo reporteros de este medio, el lugar de llegada de la marcha fue modificado de la Plaza Bicentenaria, en el casco histórico de la capital carabobeña, hasta la estación Cedeño del Metro de Valencia.
De acuerdo a lo denunciado por Brayanny Rangel, perteneciente al movimiento Carabobo LGBT, las autoridades correspondientes negaron el permiso para el uso de ese espacio público, donde se tenía prevista la realización de varias actividades post marcha.
“Desde el principio se tenía planeado realizar un bazar y shows en esa plaza, pero el permiso fue negado inmediatamente por varias personas de una organización política”, explicó sin mencionar concretamente a los responsables de lo que luego denominaron como “sabotaje”.
A pesar de los inconvenientes, Gabriel Chourio, otro de los organizadores, aseveró que el próximo año insistirán en seguir realizando este tipo de protestas pacíficas porque todavía “hay mucha vulnerabilidad en la ciudad para las personas de la comunidad. Siempre ven las marchas como un bochinche, como un juego, pero marchar es importante para la reivindicación de nuestros derechos porque sabemos que en este país no tenemos leyes que nos protejan”.
Habrá más actividades este año y el próximo
Los miembros de Carabobo LGBT insistieron en la necesidad de continuar luchando por la dignificación de los derechos de la comunidad y prometieron repetir el evento en 2024, con una programación más ampliada.
Chourio también informó que este año organizarán otras actividades que involucren la participación principal de personas con diversas identidades de géneros y orientaciones sexuales para realzar la representación de la comunidad en Valencia. Invitó a los carabobeños a mantenerse atentos a las redes sociales de @carabobolgbt.
