Para este asueto de Semana Santa, el Terminal de Pasajeros del Big Low (en San Diego), dispone de al menos cuatro mil 500 unidades de transporte para movilizar a los temporadistas.
Luis Gómez, director del terminal, informó que ya ha sido desplegado un plan de seguridad con el apoyo de todos los organismos policiales del estado, para garantizar la integridad de los pasajeros y para prevenir cualquier incidencia delictiva.
El dispositivo cuenta con 180 funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana, el Cicpc, la Policía de Carabobo, la Policía Nacional Bolivariana y la Policía de San Diego. Además, están colaborando uniformados del Instituto Nacional de Tránsito Terrestre, el Instituto Autónomo Municipal de Tránsito y Transporte Público de Valencia, la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos, las fiscalías del Ministerio Público en Carabobo con competencia en materia de menores y el Consejo de Protección del Niño, Niña y Adolescente.
“Hay bastante control en el terminal por parte de todos los organismos de seguridad. Hasta el momento no se ha presentado ninguna anomalía, todo ha transcurrido con normalidad”, aseguró durante una llamada telefónica.
Buses piratas están siendo chequeados
Gómez alertó que al igual que en años anteriores, han estado luchando para la regularización de transportistas piratas. Explicó que una comisión de la PNB ha estado supervisando la presencia de las unidades informales en los alrededores del terminal terrestre. “El sábado retuvieron a tres unidades y el domingo a 10. Los funcionarios chequean sus documentos, ven que no haya problemas con la propiedad del vehículo y les dan una charla de orientación”, detalló.
Por otra parte, indicó que el fin de semana se movilizaron diariamente alrededor de 10 mil 500 personas. “Ese es el promedio diario que tenemos, aunque hoy martes no hubo mucho movimiento, pero esperamos que a partir del jueves esa sea la cifra diaria”, agregó.
