¿Qué hay que tener en cuenta al decidir qué ponerse en una primera cita? Una vez leí que el atuendo ideal son unos pantalones de mezclilla, una camiseta blanca y un sujetador negro. ¿Sigue siendo cierto? — Gillian, Vancouver, Canadá
En primer lugar, no existe un atuendo ideal. Las personas, de todas las edades, formas, geografías y situaciones, son demasiado y gloriosamente variadas. Lo que puedo ofrecer, sin embargo, es una filosofía de moda para la primera cita.
También, un punto de referencia.
De hecho, cuando leí por primera vez esta pregunta, la piedra de toque cultural que me vino a la mente fue la película de 2004 de Adam Sandler y Drew Barrymore Como si fuera la primera vez (por razones obvias). Pero dado que la mujer en cuestión tiene amnesia a corto plazo y repite el mismo día una y otra vez prácticamente con la misma ropa, después de pensarlo decidí que una mejor referencia sería la reciente serie de Netflix Nadie quiere esto. Como comedia romántica de nuestros tiempos, es la mejor guía de moda para la primera cita que he visto.
De hecho, ha generado todo un subgénero de TikToks dedicado a lo que se pone el personaje de Kristen Bell durante sus diversos encuentros con su novio rabino, interpretado por Adam Brody. Creo que se debe a que su vestuario encarna a la perfección lo que el diseñador Christopher John Rogers dijo que era la forma ideal de abordar el vestuario de la primera cita: “discreto, pero con un toque de sorpresa”.
Debes pensar en “lo que te pones todos los días, pero un poco aumentado”, dijo. Por ejemplo: prueba con unos pantalones de mezclilla, una camiseta y unos aretes llamativos. O un vestido con zapatos deportivos. La noche en que el personaje de Bell conoce al de Brody, lleva unos jeans negros y un body negro de Abercrombie & Fitch sin hombros. En su primera cita, llevaba pantalones de mezclilla, botas de tacón bajo y una camisa de botones negra y ajustada de Mango.
Se trata de sentirse cómoda, en todos los sentidos de la palabra. Esto significa ropa que sea físicamente cómoda, claro. No hay nada peor en cualquier cita (pero especialmente en la primera) que llevar zapatos que te hacen cojear o ropa demasiado ajustada para comer o cualquier cosa que requiera muchos ajustes y tirones y otros acomodos que te distraigan de la persona con la que estás.
Pero también significa ropa psicológicamente cómoda. Quieres sentirte como la versión más relajada y pulida de ti misma, sin revelar demasiado necesariamente. Al fin y al cabo, una primera cita no es más que el principio de un proceso de descubrimiento.
Lo más probable es que quieras que parezca que te has esforzado, pero no demasiado. Quieres verte informal, pero no demasiado. (No quieres transmitir la idea de que no te importa en absoluto). Tampoco quieres ponerte nada que pueda predisponer a la persona con la que te verás a sacar conclusiones estereotipadas sobre quién eres.
Por ejemplo: cuando los dos personajes se conocen en Nadie quiere esto, Bell lleva un abrigo gigante de piel sintética. Más tarde, Brody la deconstruye en poco tiempo, anunciando: “¿Llegas a una fiesta con un enorme abrigo de piel porque te asusta que no te crean especial o diferente? Lo siento, cariño. Eres vulnerable”.
Puede que quieras evitarlo. O no. En cualquier caso, recuerda que todo lo que te pongas se leerá como hojas de té.
Ah, y un consejo más, de un colega: evita vestir de blanco, sobre todo si vas a un restaurante donde es probable que haya vino tinto, salsa de soya o cualquier otro comestible que pueda salpicar. Que se te caiga algo encima nunca se ve bien, pero preocuparse por ello es aún peor.
