Ante la conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer el lunes 25 de noviembre, el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) alertó sobre la situación de vulnerabilidad extrema que viven las mujeres privadas de libertad en las cárceles y calabozos
policiales de Venezuela. El observatorio advirtió que las presas en el país son invisibilidades y sometidas por el Estado a violencia sexual entre otras-, discriminación, torturas y tratos crueles, inhumanos y degradantes.
«En numerosos casos, estas mujeres son obligadas a mantener relaciones sexuales con custodios del Ministerio para el Servicio Penitenciario o efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) a cambio de beneficios, una práctica que viola gravemente sus derechos humanos», indicó el OVP en una nota de prensa.
Indicó que las condiciones de reclusión de las privadas de libertad son inadecuadas y afectan de manera desproporcionada a las mujeres en comparación con los hombres. «Muchas enfrentan humillaciones, alimentación insuficiente y carencias de agua potable para su higiene personal, lo que agrava su situación de exclusión y maltrato. La mayoría de ellas ni siquiera tienen acceso a toallas sanitarias o tampones para mantener la higiene durante